miércoles, 12 de enero de 2011

La risa, remedio infalible


Recuerdo un día en que un amigo se volteó para saludarme mientras caminaba por la vereda, el resultado: al mirarme chocó violentamente contra un poste de alumbrado público, recuerdo haberme agachado para reírme y quedar exhausto y sin espiración. El mismo amigo pudo tomar venganza tiempo después cuando tuve la brillante idea de salir al balcón de su casa a tomar un poco de aire, sin advertir que la ventana de vidrio estaba cerrada.

Hasta donde yo se, el hombre se considera como tal desde que comienza a caminar en dos patas, y perdió algo de pelo, así como ganó algo de cerebro, lo que siempre me he preguntado es cuándo comenzo a reír, quisiera saber quien dio la primer carcajada, y por que motivo, y creo que una de las grandes diferencias con las demás especies nunca se tiene en cuenta. Después de una ardua investigación concluí que es muy probable que la primera carcajada haya soltado cuando uno de los monos cayó de un árbol tratado de recoger un fruto, provocando lo risa de los demás monos.

Nos reímos de el ridículo y de la mala suerte de los demás, de la situaciones inesperadas e insólitas y los monos se siguen cayendo de los árboles, y lo que es peor, mientras mas solemne y aparentemente "seria" y civilizada es una situación es mas simpática cuando algo descabellado sucede. Cuando estaba en el colegio asistí al gran estreno de la película Batman en Paraguay, en aquel entonces se usaban todavía los grandes cines, el caso es que antes de iniciar la película viene bajando solemnemente y como todo un "winner", un hombre trajeado, representante de alguna marca auspiciante para dar el discurso inicial, por desgracia (para él pero gracia para nosotros), la alfombra roja del paseo central estaba mal extendida y tenia algunas arrugas, y el muy desafortunado tropezó con una de ellas cayendo estrepitosamente, toda la sala estallo en risa, pero lo mas simpático fue verlo desaparecer repentinamente para luego levantarse instantáneamente en un gesto de "aquí no paso nada".

"La risa, remedio infalible", es el título de una sección de la famosa revista Selecciones cuyos chistes nunca me vinieron en gracia. Decir que la risa ayuda a estar bien, es como decir que el agua moja o que el cura tiene sexo, cualquier revista dominical tercer mundista alguna vez saco algún articulo enumerando los beneficios de la risa. La risa más sana según dicen ,es reírse de uno mismo. Un psicólogo de apellido Allport clasifico como uno de los puntos mas importantes de la madurez emocional a la capacidad de reírnos de nosotros mismos, por otro lado un psicólogo más contemporáneo llamado Albert Ellis,opinaba que la mayoría de las angustias de los seres humanos son a causa de tomar la vida demasiado encerio.

Una película que toca este punto con maestría es Melinda Melinda, de Woody Allen, en la misma se puede ver la misma trama desarrollada desde dos puntos diferentes, el primero con un tono dramático, y el segundo con un todo de comedia, con esto Woody Allen el gran neurótico y filósofo de la pantalla, nos demuestra que todo depende del lente con que se mire.

Quisiera terminar esta entrada con un poco de auto ayuda barata, y enunciar dos leyes universales

La primera: El que se picha, pierde

La
segunda: El que se ríe, vive.